Mascarillas

A tenor de los resultados de las recientes investigaciones llevadas a cabo por la Universidad de Massachussets Lowell conjuntamente con la Universidad Bautista de California, el uso de mascarillas quirúrgicas usadas llega a producir un descenso de la efectividad del 65% al 25%, lo que las convierte, irónicamente, en algo más peligroso que no utilizar mascarilla, dado el factor agravante que supone la sensación de falsa seguridad.
Por eso desde Biosalud siempre aconsejamos a nuestros clientes que sigan las instrucciones relacionadas con el tiempo de uso que siempre aparece en nuestro packaging, que en el caso de las mascarillas quirúrgicas es de 4 horas; siempre y cuando no se humedezcan o deterioren, en cuyo caso deben ser reemplazadas.

Comienza la carrera por vacunar a la población, siendo Reino Unido el primer país en utilizarla de manera sistemática.

Las vacunas de Moderna y de Pfizer han sido las que más efectividad han demostrado y parece ser que serán las que se implantarán paulatinamente en todos los países del mundo para frenar el contagio del COVID-19.

Aunque parece ser que el estar vacunado no conllevará estar exento de utilizar mascarilla, pues, según informaciones que se están haciendo públicas, el hecho de estar vacunado no sgnificará que no se pueda seguir propagando la enfermedad a los demás. Es decir, que el vacunarse supondrá no contagiarse, pero no está todavía claro al cien por cien si este hecho implicará el que no se pueda contagiar a otros.

La explicación que se ha dado es que, si bien la vacuna se aplicará por vía intravenosa, no se sabe a ciencia cierta hasta qué punto los anticuerpos que generará alcanzarán las fosas nasales para resultar efectiva frente a su propagación futura.

Por lo tanto, lamentablemente, tendremos que seguir utilizando mascarilla durante unos meses, hasta que el coronavirus COVID-19 haya cesado su trágica carrera infecciosa.

Su uso entre la población no es muy común, pero todavía podemos ver entre los ciudadanos y los trabajadores que trabajan de cara al público en entornos no sanitarios, con personas que usan las láminas de acetato frente a su cara.
Desde luego que, a pesar de transmitir a primera impresión, una sensación de seguridad, lo cierto es que son un auténtico peligro, tanto para sus portadores como para quienes les rodean. El motivo es que sólo protegen de las microgotas que expulsa quien las usa al hablar o toser, pero no hace nada frente a los aerosoles, que se cuelan libremente por la parte inferior y los laterales; tanto en una dirección como en la contraria.
Su uso, pues, debe de circunscribirse al ámbito sanitario para frenar las salpicaduras directas de fluidos. Y se puede hacer una excepción en los casos en lo que estemos interactuando con una persona sordomuda y sea necesaria la comunicación con ella.

Es obvio que usar la mascarilla de continuo nos resulta incómodo y por eso a menudo nos vemos en la necesidad de descansar de ellas.
Pero el problema viene cuando decidimos hacerlo dejándola colgar de una de las orejas o bien colocarla en la barbilla a modo de babero.
Y es que con este gesto lo que hacemos es que corremos el riesgo de que la zona posiblemente contaminada de nuestras manos toque nuestra boca o nuestra nariz y acabe transmitiendo el COVID-19 por contacto. Por eso se recomienda que, en la medida de lo posible, evitemos estos hábitos y, siempre que no haya nadie alrededor, si queremos quitarnos la mascarilla, lo más recomendable es cogerla por las tiras y retirarla totalmente; para luego, cuando vayamos a volvérnosla a poner, volverla a coger por las tiras. Evitando en todo momento el contacto de la zona interna que luego contactará con nuestra nariz y boca.
Con estos pequeños gestos podremos evitar males mayores.
Por eso, desde Biosalud aconsejamos a nuestros clientes tener paciencia y cuidar la manipulación de las mascarillas hasta que esta pandemia pase; que a buen seguro será pronto.

La aparición de síntomatología que afectaba al sistema nervioso central ( pérdida de olfato y gusto, mialgias o dolores musculares de origen nervioso, entre otros ) ha mantenido en vilo a los investigadores desde un comienzo, pues no se tenía la certeza de cómo el COVID-19 podía alcanzar dicha zona cerebral; pues era casi imposible que el coronavirus pudiera vencer la barrera hematoencefálica, que protege al cerebro de la sangre.
Por eso ha despertado interés mundial la investigación llevada a cabo en Alemania y que se basa en la autopsia de 30 fallecidos por el COVID-19 y que ha detectado restos del coronavirus en las fosas nasales, por lo que es probable que esta sea la vía por la que accede directamente al cerebro.
Por esto es importante no descuidar cubirse adecuadamente la nariz al usar la mascarilla, y evitar en lo posible esos huecos laterales que en ocasiones quedan abiertos en la base de la nariz. Para ello recordamos a nuestros clientes que lean detenidamente nuestras instrucciones y se aseguren que utilizan el cable interior de nuestras mascarillas para presionar ligeramente una vez colocadas y que se aseguren una protección mayor.

Ayer se presentó en sociedad nuestra primer fábrica de mascarillas Biosalud en España que está en la localidad de Petrer, en la provincia de Alicante.

Al acto asistieron las autoridades políticas locales y comarcales y los representantes de la empresa, Francisco Esteve y Mónica Blanes, narraron a los presentes que la iniciativa empresarial está elaborando mascarillas FFP2, FFP3 y desechables a un ritmo de 15.000 diarias, pero que pronto tienen proyectado triplicar los turnos.

La marca Biosalud, en palabras de su representante, «buscan hacer llegar al público unas mascarillas de calidad a un precio asequible».

Actualmente pueden encontrarse en farmacias de toda España y la red comercial de distribución europea está comenzando a formarse.

Por su lado, la alcaldesa de Petrer, Irene Navarro, manifestó que: «En el momento de pandemia es una oportunidad de aportar, crecer y reinventarse, y esta empresa, que proviene de otra de marroquinería, lo ha sabido hacer»

Acabamos de incorporar en nuestra tienda online el pago por Bizum para facilitar la compra en nuestra tienda online www.biosaludglobal.es a nuestros clientes.

Ahora simplemente usando el teléfono móvil puede hacerse el pago y recibir su pedido en 24-48 horas.

Biosalud, cuidando el bienestar de nuestros clientes.